Al ser ricas en fibra, el consumo de semillas de amapola ayudan a evitar el estreñimiento y regular el tránsito intestinal. El zinc, el selenio y los ácidos grasos esenciales que aportan las semillas de amapola colaboran en la regulación refuerzan las defensas de nuestro organismo.
Las semillas de Lino marrón ayudan a prevenir el estreñimiento. El lino es útil para el tratamiento de anomalías digestivas como la gastritis, la acidez, la inflamación intestinal o la diverticulitis. También protege las mucosas del aparato urinario y sirve para prevenir y tratar afecciones como la cistitis, la nefritis o la uretritis. También son ricas en Omega 3.
Es fuente de proteínas y contiene todos los aminoácidos esenciales. 100 g de trigo sarraceno contienen entre 10 y 15 g de proteínas aproximadamente. ¡Excelente para los deportistas! También es una buena fuente de ácidos grasos Omega 3 y Omega 6, beneficiosos para mantener el normal estado del sistema cardiovascular y los niveles de colesterol.
Las semillas de sésamo pueden ser una rica fuente de aceites naturales, lignanos, antioxidantes, proteínas, fibra dietética y vitaminas y minerales como calcio, hierro, potasio, fósforo, magnesio, vitaminas B y vitamina E según el USDA.